miércoles, 5 de diciembre de 2012

Safyta. Italia 1069. 21/11/2012. Cena

Siempre dije que no soy un estudioso de la comida (aunque sí sea un aficionado a la misma), por lo que a la dificultad de opinar objetivamente acerca de la amiga comida, se le suma la dificultad de ser comida de una parte del mundo que nunca visité. Esto no significa que vaya a abstenerme de opinar sobre la comida (porque sabemos que voy a hacerlo), pero si alguna vez aclaré que opino sin un fundamento mas que mi paladar no entrenado, le sumo mi falta de conocimiento de geografía gastronómica.

El lugar no es muy grande, está decorado de acuerdo a la comida que sirve, incluso en las mozas, que tienen colgando de sus cinturas esas cosas árabes que hacen ruido mientras caminan que no se si tienen un nombre específico.

El lugar se llena en pleno día de semana, por lo que le recomiendo reservar, por mas que vaya (como nosotros) un miércoles.

No me pregunten el motivo, pero la comida árabe me provoca comerla con cerveza, pero estando todavía sin compañía, me pedí una cerveza de medio litro. Algo que disfruto de la atención de un lugar, es que la moza me pregunte antes de servir si prefiero con o sin espuma. En especial porque me gusta con espuma. También disfruto que pueda explicarme las cosas que hay en el menú, y crean ustedes, que hace falta explicación!

Voy a confesar algo. Este post, está realizado sobre la segunda vez que fui a este lugar, ya que del primero no me acuerdo la fecha, y la verdad que la atención fue bastante parecida en ambas ocasiones. La única diferencia fue que pedí cosas distintas!

En dos ocasiones, y dos mozas distintas, la atención fue muy buena, considerada. Solo preguntaron una vez si estaba todo bien, después de comer, retiraron los platos a tiempo, sin ser cargosas, sin apurarnos (a pesar de que el lugar es chico), ni dejar el plato demasiado tiempo en la mesa.

Con respecto al precio, dejenme decirle que este lugar es la viva evidencia de que se puede estar en pleno centro sin cobrar una cerveza de litro 40 mangos, y cobrarla entre 22 y 27 pesos, según la marca. Con la comida lo mismo, creo que el plato mas caro de la carta salía 30 pesos. comimos con entrada de empanada árabe, torreja de seso, plato principal, cerveza y postre (Personalmente me tomé uno de helado con vodka y licor de Cahis), y gastamos 80 pesos cada uno, incluyendo propina.

Aclaré que no soy un gourmet, pero la verdad que la comida la disfruté mucho en cuanto a su sabor, aún cuando ni siquiera puedo decir si era comida auténticamente árabe. Voy un poco mas allá y les digo que las únicas cosas que le encontré como contra al lugar, fueron que me pareció que la vajilla era muy común de bar para un lugar tan bien ambientado en la decoración, accesorios de las mozas y demás, y que las sillas son de plástico (aunque son sillas de plástico duro, y con apariencia de sillas de restaurante, y de muy buena calidad).

CONCLUSION: No hace falta esperar a las Colectividades para comer buena comida árabe. En este lugar va a comer mejor comida, mucho mas barata que en las Colectividades, en un lugar mucho mas lindo y muy bien atendido. Planeo volver y seguido, siempre reservando, que sino me quedo sin mesas!